Si la solicitud del Presidente gallego es tal como la transmite El Correo, estaríamos ante dos posibles desagradables escenarios para don Alberto Núñez Feijóo. La primera opción, si bien no resulta grata, implicaría que el mandatario no dispone de la información fehaciente imprescindible en estos casos, puesto que el Centro Gallego está intervenido judicialmente pero no en estado concursal. La segunda sería realmente grave, por que incurre en un engaño consistente en mal informar al Ministro de Cultura de España, quien a su vez, erróneamente informado, anticipa un proceder que resultaría un placebo en las circunstancias actuales por lo siguiente:
1º El "legado" está unido y en posesión de sus legítimos dueños que somos los socios del Centro Gallego.
2º En el peor de los casos, jamás el "legado" volverá a Galicia porque es un patrimonio argentino, que nunca perteneció a Galicia y que la legislación vigente no permite sacar del país.
Moraleja para el señor Ministro: Aceptar sin análisis lo que transmite un adversario político natural, no suele ser la mejor opción.
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