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domingo, 25 de abril de 2010

ZAPATERO Y RAJOY UN SOLO CORAZÓN

Seguramente al escuchar el enunciado del título la gran mayoría de la audiencia se preguntará ¿A dónde irá a parar Muxo? Con tamaña comparación. Puesto que, seguramente, tendrán presente las agrias discusiones y polémicas que ambos han mantenido en los debates parlamentarios y en los distintos escenarios de las dos campañas que los enfrentaron en la carrera hacia la presidencia del gobierno español.
Pues bien, las posturas, en apariencia, irreconciliables de los dos popes de los partidos olíticos mayoritarios de España se han confundido en una sólida y única postura –que de no ser por lo nefasta, sería enternecedora-, cual es: convertir a los españoles de la diáspora, en ciudadanos de una categoría inferior a los de primera que viven en el Reino.
Yo no mencionaré una vez más lo que la emigración representó y representa para España, sólo repetiré que la Constitución Española y el Estatuto de los Españoles en el Mundo, dicen que todos los españoles somos iguales ante la ley y que tenemos el derecho de elegir y ser electos. No obstante, las fuerzas políticas españolas se han puesto de acuerdo para constituir una comisión que estudie la forma de quitarnos estos derechos.
Algunos dicen cuestionar que votemos en las elecciones municipales, otros que hay que crear una jurisdicción y que podamos votar para elegir senadores, todos critican el sistema de voto por correo porque no es fiable, ninguno hasta ahora dio la cara y expuso públicamente lo que hace meses están cocinando en un aquelarre “neboento”.
Estoy absolutamente de acuerdo en que el actual sistema de voto por correo se presta para el fraude, pero, ¿Quién promueve y realiza el fraude, usted señora , usted señor?. Nooo, el fraude lo practican los mismos que lo critican y pretenden poner freno a su inmoralidad restándonos el - para nosotros sagrado- derecho a emitir nuestro sufragio como cualquier hermano del reino.
España atraviesa momentos difíciles, ETA es un flagelo que nos conmueve a todos los españoles, la crisis económica nos inquieta pese a vivir en el exterior, el juez Garzón y los retoños falangistas dividen a nuestra sociedad. Sin embargo nunca encontramos ni siquiera coincidencias mínimas en el tratamiento parlamentario de estos temas.
Que frustrante y doloroso que las coincidencias sean de máxima cuando se trata de discriminar a los que por distintas razones sufrimos las consecuencias del destierro, que no otra cosa es la emigración. O acaso hombres tan lúcidos como Rodríguez Zapatero y Rajoy, creerán que lo nuestro fue ir a una fiesta y abandonar las responsabilidades de un buen ciudadano.
Hasta tanto no aparezca la claridad y valentía de desvelar lo que se está fraguando con respecto a nuestro futuro como ciudadanos españoles con plenos derechos, yo seguiré sosteniendo: Zapatero y Rajoy, un solo corazón.