domingo, 14 de octubre de 2018

EN EL CENTRO GALLEGO, NADA NUEVO BAJO EL SOL - Editorial del 14-X-2018


 El Centro Gallego, está intervenido judicialmente desde hace seis años. La intervención fue el resultado de la pésima administración que habían ejercido durante dos años las agrupaciones Galicia y Unión Gallega, período en el que disolvieron la sociedad con la Xunta de Galicia materializada en la Fundación Galicia Saúde, y finalizado con una parálisis, casi total de las actividades, motivada en el no pago de salarios al personal durante cinco meses, originando tal situación que, un grupo de asociados solicitasen la intervención estatal. Por otra parte, las agrupaciones A Terra, Breogán y Celta, confabuladas con el propio gobierno de la autonomía y la Embajada de España, desalojaron al Centro Gallego de la obra social OSPAÑA, oportunamente creada para apuntalar el sostenimiento económico de nuestra institución.

Las dos primeras agrupaciones ahora unidas a las fantasmales Breogán y Celta, y a la entonces inexistente Salud y Cultura, conformaron una coalición de cinco que se enfrentaron a la nueva Agrupación A Terra –sin nexo alguno con las autoridades que colaboraron en el despojo de OSPAÑA-, en la elección realizada el pasado 10 de septiembre para elegir junta directiva y completar los restantes cargos en los cuerpos estatutarios.
Justificando el título de este comentario, nada nuevo. Antes de la elección mantuvimos una reunión a la que concurrí con la expectativa de recibir propuestas superadoras para cuando nos tocase reasumir la conducción del Centro, pues no. Se me formuló el ofrecimiento de todos los cargos de la junta directiva para nuestra lista y compartir paritariamente los representantes de socios. Como quedó demostrado posteriormente, no era otra cosa que un tramposo ofrecimiento ¿Por qué tramposo? Por la sencilla razón de que ellas no pensaron en ningún momento asumir la responsabilidad de dirigir la entidad, razón por la que no presentaron candidaturas para la junta directiva que, de haberlo hecho, aún perdiendo la elección tendrían en la misma la representación que estatutariamente les correspondería del 33% de los cargos.

Unos días antes de la votación, un sector gremial minoritario convocó a una protesta en la entrada al hospital el día del comicio. Preocupado por tal convocatoria, llamé a una persona referente de la lista opositora a la que dejé el siguiente mensaje:




Jamás recibí respuesta, por ello, horas antes de la elección solicité públicamente a los organizadores de la protesta que la misma fuese realizada en la acera de enfrente al hospital. La solicitud fue aceptada, la protesta se realizó donde lo sugerí, lo que ameritó mi agradecimiento al sector gremial por su comprensión, sabiendo incluso que, sus representantes dentro del sanatorio social arengaban a los socios en contra de nuestra lista. Lo que no deja de ser sorprendente, por lo siguiente: Esa fracción gremial rechaza -con todo derecho- la venta del edificio hospitalario, por lo que, coincidiendo las dos listas en la necesidad de tal venta, ¿cual sería el motivo por instar a votar por una de ellas? A mi entender, porque ellos también descreen de la voluntad de venta expresada públicamente por la lista de las cinco agrupaciones. 

Debo agradecer también a la gran mayoría de los trabajadores/as que, contrariamente al sector minoritario, apoyaron nuestra presentación y se congregaron después del escrutinio para escuchar el mensaje que transmití a los pocos socios y muchos trabajadores/as, reunidos en el vestíbulo de entrada.

Con los resultados conocidos, y ante mi partida al día siguiente hacia España, me dirigí a la autoridades y candidatos de la otra lista para expresarles mi voluntad para que, en ese mismo momento, iniciásemos el imprescindible diálogo que necesitamos para encarar la solución definitiva a los males del Centro Gallego. Ante unas quince personas, recibí, dos adhesiones, desplantes varios y un insulto. Transcurrido un mes de tal despropósito, sucedió lo que lamentablemente nos demuestra que siempre se puede ir a peor. La misma persona que me insultara entonces, le envió una carta documento al interventor judicial, intimándolo a que, en el término de diez días, proclame a la junta directiva electa en el mencionado comicio.

Yo no sé si esta persona hizo tal envío a título personal o es algo consensuado entre las cinco agrupaciones. Si fuese la primera opción, creo que las agrupaciones debieran emitir una rápida aclaración, lo contrario sería asumir el ridículo y la mala fe que tal reclamo implica.
Ridículo por que el interventor no está facultado para proclamar autoridades, salvo que así se lo ordenase el juzgado interviniente. Mala fe porque, no habiendo querido asumir su lista el compromiso de dirigir al Centro, ahora pretenden marcar los tiempos de una asunción que perfectamente saben, no modificaría en absoluto la situación imperante ¿O lo que quieren es tener la oportunidad de achacarnos los males que ellos mismos contrajeron y, vengarse cínicamente de la paliza electoral que en una jornada democráticamente incuestionable le propinó el 67% de los votantes?

La salida de la actual situación del Centro Gallego no será tarea de una Junta Directiva. Tal como reiteradamente dije durante la campaña, nuestro convencimiento pasa, para la solución, por la venta o gerenciamiento del hospital. Cualquiera de estas alternativas deberá ser aprobada por el cuerpo de representantes, con total independencia de lo que pudiese creer o proponer la junta directiva, por lo tanto, la asunción o no de la misma no tendrá ninguna injerencia en la posible operación. La tarea de la junta será determinante sí, en el período posterior a la cesiòn de la asistencia sanitaria. 
La Junta Directiva electa deberá gestionar: el panteón social, el patrimonio inmobiliario, el cultural, el teatro, y asegurar la pervivencia de la mutual, supervisando también las condiciones de la asistencia a los socios.

Gracioso resultaría, si no fuese tan dramático, que quienes arrastraron al Centro a una intervención judicial, tras una gestión económica desastrosa y, no quisieron asumir ningún compromiso de dirección, pretendan la asunción inmediata de una junta directiva que, ni encabezada por "Mandrake el mago", podría modificar la desesperante situación de nuestra institución.

Hemos presentado una solicitud al interventor para que instrumente una moratoria para los socios que perdieron tal condición durante el último año. Motivó el pedido la recepción de varias notas en tal sentido, enviadas por exsocios. Aguardamos una pronta resolución.

Mensaje final a los socios. Aunque oficialmente no haya nada nuevo bajo el sol, oficiosamente, seguimos con el mismo optimismo y ganas que nos llevaran a comprometernos ante ustedes.

3 comentarios:

  1. Y en tanto nos. No tenemos donde atendernos habida cuenta que por nustra edad no somos aceptados en prepaga alguna. PAMI tiene demoras increibles para realizar estudios al igual q solicitar turno para atenderse por especilista. Los ancianos nos damos cuenta q nos han abandonado.

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  2. En que fecha estima se podran reiniciar las tratativas para el gerenciamiento o venta.
    Considerando que se haran preservar las condiciones de la actual categoria de los socios y la antiguedad laboral de los trabajadores se nos informara cuales van a ser las herramientas que dispondremos para que se cumpla y respete con lo acordado ?

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  3. En ningún lado dije que se haya interrumpido ninguna tratativa. Desde el momento de nuestra asunción, todas nuestras acciones serán informadas a los socios.

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