domingo, 20 de junio de 2004

La emigración no es una masa amorfa

Hace algunos años el BNG perdió un diputado en A Coruña después de conocerse el voto emigrante. De allí a un tiempo, al por entonces portavoz del Bloque, Xosé Manuel Beiras, le atribuyeron unas declaraciones en las que calificaba a la emigración como "UNA MASA AMORFA DE VIEJOS QUE SE DEJA LLEVAR", y digo, le atribuían, porque en un encuentro que tuve con el en el Parlamento de Galicia me negó enfáticamente haber dicho tal cosa, aunque no quiso decirlo con el grabador funcionando. Pero dejemos al señor Beiras y expliquemos porqué la emigración no es una masa amorfa y que además tampoco se deja llevar.
En las últimas elecciones nacionales, los gallegos de la diáspora le concedieron al PP el 58,36% de sus sufragios; al PSOE el 33,36%; al BNG el 3,73%; y a los demás partidos el 4,55%, esto fue para el 14 de marzo.
El último domingo tuvimos otra vez elecciones, en este caso al Parlamento Europeo, los votos de los gallegos esparcidos por el mundo fueron: PSOE 33840; PP 25148; y BNG 2675. Como se ve, contrariamente a lo que venía sucediendo en los últimos años, en los que siempre ganaba el PP, esta vez venció el PSOE.
Cómo explicar el cambio?. Muy sencillamente: Cuando se enviaron los votos para las nacionales, aún no sucedieran los atentados de Madrid por los que los ciudadanos de la península castigaron al PP, ahora en las europeas los de afuera castigaron al PP convencidos de que su política de alineamiento con los EEUU fue la causa de los atentados, y premiaron al PSOE por el retiro de las tropas españolas de Irak. El voto de los gallegos para el Bloque es menudo y seguirá siéndolo mientras sus dirigentes no se acerquen de verdad a la emigración ( po lo menos en Argentina, no lo hicieron): En mi modesto entendimiento lo antedicho es una prueba cabal de que la emigración gallega, no sólo no es amorfa, sino que además razona y patalea cuando tiene que hacerlo.

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